El papel de Lime en la transición energética: apoyo a la metalurgia no ferrosa
A medida que el mundo acelera su cambio hacia una energía más limpia, la demanda de metales no ferrosos, como el litio, el cobre, el níquel y el cobalto, está aumentando rápidamente. Estos metales son fundamentales para la generación, transmisión y almacenamiento distribuidos de energía, así como para el sector en expansión de los vehículos eléctricos (VE). En Lhoist, nuestras soluciones de cal, dolomita y minerales desempeñan un papel fundamental en aplicaciones metalúrgicas y no metalúrgicas que son esenciales para esta transición.
Litio
El litio es una piedra angular de la transición energética, ya que es un componente fundamental de las baterías que alimentan los vehículos eléctricos y almacenan la energía renovable. La cal es indispensable en el procesamiento de fuentes de litio en bruto, como salmueras y minerales, para obtener compuestos de alta pureza aptos para baterías, como hidróxido de litio y carbonato de litio. Estos compuestos son esenciales para la fabricación de baterías de ion de litio eficientes y fiables.
La cal se utiliza en todo el procesamiento del litio para:
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Eliminar las impurezas
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Optimizar las condiciones de pH para las reacciones químicas
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Reaccionar con carbonato de litio para producir hidróxido de litio
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Tratar los gases de combustión generados durante el procesamiento a alta temperatura
Cobre, níquel y cobalto
La cal es igual de importante en la extracción y refinado del cobre, el níquel y el cobalto, metales fundamentales para la transición energética:
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Cobre: Se utiliza en cableado eléctrico, motores y sistemas de energía renovable, como paneles solares y turbinas eólicas.
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Níquel: Componente esencial en los cátodos de las baterías, especialmente para los vehículos eléctricos, así como en el acero inoxidable y las aleaciones resistentes a la corrosión.
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Cobalto: Esencial para la estabilidad y densidad energética de las baterías de ion de litio y también se utiliza en superaleaciones para aplicaciones aeroespaciales y herramientas de alto rendimiento.
En el procesamiento metalúrgico, la cal se utiliza para:
- Controlar el pH de la pulpa para optimizar la flotación de los minerales
- Neutraliza los ácidos utilizados como licuantes en procesos de lixiviación
- Eliminar las impurezas solubles de los circuitos de lixiviación
- Estabilizar los relaves y gestionar las corrientes de residuos
- Mitigar el drenaje ácido de las minas y apoyar la protección medioambiental
- Mejorar la fluidez de la escoria durante la fundición
Colaboración por la eficiencia: soluciones de cal a medida y competencias
En Lhoist, ofrecemos soluciones de alta calidad para cal, dolomita y minerales, respaldadas por unas competencias técnicas profundizadas y un compromiso con las alianzas a largo plazo. Colaboramos estrechamente con los clientes del sector de la metalurgia no ferrosa para ofrecer un apoyo personalizado que va más allá del suministro de productos.
Descubra cómo podemos ayudarle
Ayudamos a nuestros socios:
- A seleccionar el producto de cal o dolomita óptimo para cada etapa de su proceso
- A maximizar el rendimiento de los reactivos y la eficiencia de los procesos
- A mejorar la recuperación de metales y la uniformidad de los productos
- A reducir el impacto medioambiental a través de soluciones naturales y eficaces que respalden la conformidad normativa y los objetivos de sostenibilidad
Tanto si está optimizando la extracción de litio como si está mejorando la fundición de cobre, Lhoist ofrece el conocimiento de la industria y el enfoque colaborativo que le ayudará a alcanzar el éxito.